martes, 29 de julio de 2008

Dame crack y llámame support officer

Sabe Dios que después de la última de Rambo mis glándulas lacrimales quedaron inservibles, así que no es este un texto de queja. No, esto es un canto a la vida, la crónica de una epifanía, un simposio sobre lo que significa alcanzar la cremosidad espiritual. Pero para disfrutar de un entendimiento absoluto y poder caminar en armoniosa cohesión con el autor es necesaria una inmersión narrativa en lo que fue mi vida una tarde/noche de un lunes 21 de Julio.

El viernes anterior un cliente bastante gracioso y presumiblemente a punto de irse de vacaciones preguntó que cuánto le costaría que le preparásemos doce cables en su sala entre varios de sus armarios de equipos informáticos. Y digo gracioso porque mi departamento es el de soporte, y aquí nos movilizamos cuando alguien quiere algo urgente o se le están pegando las lentejas y su técnico más próximo está en Munich. Salimos caros, pero somos como los jodidos marines coloniales. Y hasta sonreímos, hacemos pompitas y nos lo tragamos si hace falta. Así que por doscientos treinta metros de cable nos pusimos creativos a la hora de hacer una factura, a ver si con un poco de suerte al cliente se le quitaban las ganas y se lo pedía al departamento de implementación por los medios habituales y con plazos de trabajo más normalitos. A los diez minutos teníamos el fax firmado con el presupuesto. Hijos de puta. Mi jefe, un hombre sabio de la hostia, me dijo “no estamos, nos hemos ido, y este fax lo veremos aquí el lunes”.

Y llegó el lunes. Y en pocas horas, el almuerzo. Y ya a la tarde, tuve que hacer la inevitable pregunta. “¿Nos ponemos con los cables?” A lo que mi jefe sabio, pero sabio de la hostia, respondió “ocúpate tú, que yo me tengo que ir a un curso”. Ceros, quilates, quintales, fanegas o arrobas. Ninguno es suficiente o apropiado para medir en cuantía el peso de sus cojonazos.

Nociones técnicas 1.- el rejiband:
Dícese de la estructura metálica cortada sin miramientos ni sutilezas para formar una sujeción elevada a modo de vía (normalmente atornillada al techo) por la que se pueden depositar cables varios sin que así tengan que yacer caóticos por el suelo. Es conveniente tirar los cables entre dos técnicos, tanto para evitar daños en el cable y sus conectores, como entre los propios técnicos. Existen suaves, redondeadas e inofensivas versiones fabricadas en pvc, pero su precio es inversamente proporcional al dolor que pueden causar.

Nociones técnicas 2.- el cable UTP:
Siglas que vienen de “Unshielded Twisted Pair”. Para no ponerme aburrido, el típico cable de internet que tenemos todos en casita, y que si abrimos podremos observar que por dentro consiste en ocho putos cablecitos trenzados en cuatro pares durísimos y puestos con una mala leche que te cagas, de manera que si tienes que hacer doce cables, y por tanto crimpar 24 conectores, esto significará que tendrás que aplanar y manipular con estas manitas y tu tricotosa 128 jodidos cablecitos. Eso si crimpas todos los conectores bien a la primera.

Bien, imaginemos que esto es un episodio del equipo A e intercalemos varias imágenes de Somo escaleras arriba y abajo, cable dentro y cable fuera, etiquetas puestas y etiquetas quitadas, cajas y cajas con rollos de cable mezcladas con pedazos de rejiband, sudor y sangre, y a Mr.T soldando algo, todo ello con una alegre tonada militar de fondo. No sé si alguna vez os habréis subido a unas escaleras plegables. Unas de esas cuyos travesaños son una mera barra de aluminio. No sé si habréis pasado ocho horas subidos a una mientras manipuláis mangueras de cable. A mí, desde luego, me costaba caminar a la una de la madrugada mientras recogía todos los utensilios y, teniendo en cuenta que entré a trabajar a las ocho de la mañana, me permití el lujo de gastar un ticket de taxi para volver a casa. E incluso de dejarle una nota a mi sabio jefe para comentarle que a lo mejor no entraba al día siguiente a las ocho en punto de la mañana.

Al llegar a casa me quité la camiseta mientras subía a trompicones las escaleras. Abrí el grifo de la bañera y me quité los zapatos. Los calcetines fueron más complicados, y me costaría narrar la hazaña en detalle sin recurrir al chiste de pelar la madalena. Empecé a lavarme los piños frente al espejo, pero los pinreles me dolían tanto que lo hice sentado en el retrete, empujando el cepillo de un lado a otro con el dorso de la mano. Vi el frasco de colonia frente a mí, y se me ocurrió cogerlo y rociarme los brazos llenos de cortes. No lo volveré a hacer. Escupí el cepillo de dientes que voló hasta el lavabo (el espejo se quedó guapo, guapo). Necesitaba meterme en la bañera. Y fumarme un porro en ella. Y que una chica de revista me la chupara mientras tanto. Y luego hacerle yo mi mundialmente famosa técnica del hilillo de saliva. Pero aquel plan tenía un fallo evidente: mi bañera no tenía tapón. Así que me contenté con la idea de darme una simple ducha feliz (dícese de la ducha que, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, entre enjabonado y enjabonado uno se pone tonto y se pega un homenaje). Pero mis manos eran boniatos palpitantes llenos de espantosas heridas, y las yemas de mis dedos después de 128 cables parecían haber sufrido un millón de horas de street fighter en una supernintendo, de manera que me conformé con poder mantenerme medianamente erguido bajo la alcachofa de la ducha.

Y entonces fue cuando me di cuenta. Tal vez no era más que un oso calvo encorvado y magullado bajo un chorrito de agua tibia, pero estoy más vivo de lo que lo he estado nunca. Tal vez no viva tan bien como antes, pero mi ridícula ducha sin tapón es mía, del banco y de nadie más. Tal vez no tenga ninguna chica de revista y mi cinismo sólo me deja pronunciar un “te quiero bastante” entre cubata y cubata a alguna desconocida, pero es que con eso me basta. Y tal vez en el trabajo me pego unas palizas y tengo un jefe tan putamente cabrón que aún no entiendo cómo no me he subido a un campanario con un rifle, pero es que me siento útil y me pagan una pasta.

Por primera vez en 31 vueltas al Sol me empieza a gustar mi vida.
Y el mártes llamó el cliente para decir que los cables eran cortos y no le valían.
Pero estoy feliz, coño, y tenía que contárselo a alguien.

lunes, 28 de julio de 2008

The Texas Dildo War: La importancia de los Eye babies.

Este es el Pensacola Christian College, o PCC para los amigos.



Como su nombre indica, es un centro universitario de orientación cristiana. Cabe precisar que cuando un americano se define como “cristiano” y no como luterano, católico o mormón, suele ser evangélico. Este centro lo es. No es el único ni el mas famoso. La Liberty University fundada por el fallecido Reverendo Jerry Falwell es seguramente el centro mas notorio de este tipo.

Serán como Deusto” estará pensando alguno. Aquí también tenemos centros educativos de marcada tendencia religiosa ¿no? Puesss... si. Si, pero no.

Esta es Eshter McDonald.

Desde el 2006 trabajó en el departamento del Fiscal general de los EEUU, Alberto Gonzales. Gonzales fue ese señor que dijo que torturar prisioneros de guerra está guay si estos son terroristas, y que esa etiqueta quedaba enteramente a disposición de “los buenos” para aplicársela a quien decidiesen (¿Qué quienes son los buenos? Que cosas dices...). Seguro que Gonzales ha hecho muchas cosas antes de ser Fiscal general, y hará cosas después, pero sinceramente, visto lo visto, me la sudan. El caso es que el trabajo de Eshter para el consistía en purgar. El trigo de la paja. Lo bueno de lo malo. “Los buenos” de “los malos”. Con dedicación obsesiva, la señorita McDonald peinaba la vida de cualquiera que trabajase o aspirase trabajar para los servicios legales del gobierno americano. ¿Buscaba terroristas? No, buscaba liberales. Anarquistas. Ateos. Librepensadores... ¿Titulado en Harvard? Ya, pero tiene un disco de Pete Seeger. ¿Cum Laude en Yale? Si, pero en el instituto se manifestó contra el apartheid... De repente, los títulos de tercera y cuarta que otorgan centros como el PCC o la Liberty University pasaron a valer oro. Porque el camino mas rápido para hacerse un nombre en el derecho norteamericano es pasar por la oficina de un Fiscal Federal.

¿Por qué esos centros le ofrecían garantías a la buena de Eshter? Para empezar porque ella misma es una licenciada de la PCC. Pero hay algo más. Al fin y al cabo, de Deusto han salido muchos rojeras ¿Por qué no de estos centros?

Normas. Muchas normas. Para empezar, de ingreso; la mayoría de los alumnos que ingresan provienen o bien de centros evangélicos o, sobre todo, del home schooling. Chavales educados por sus padres en sus casas, con la Biblia no ya como un libro de texto más, sino como libro aplicable a todas las asignaturas. Sin mas actividades comunes con chicos de su edad que las que proporcione la macro-iglesia evangélica mas cercana. Campamentos de rezo en verano, canales de televisión propios... una Nación Cristiana, autónoma, dentro de el país mas poderoso del mundo. Chicos puros que no contaminen al resto cuando ingresen.

¿Y una vez dentro? Normas sobre como vestirse, como dirigirse a tus profesores, tus tutores, tus vigilantes... Listas de libros y películas permitidas... porque las de prohibidas ocuparían demasiado espacio. Registro de tus habitaciones en busca de material inadecuado, que te puede ganar deméritos. Deméritos por expresar dudas sobre lo dicho en clase, por tener presintonizada una cadena de radio “no cristiana”, por entrar en una biblioteca pública... deméritos que te pueden poner en la calle. Escaleras y ascensores segregados por sexos, prohibición de hablar con el otro sexo sin personal de la universidad presente. Reglas que establecen el tiempo que puedes sostener la mirada a un miembro del otro sexo... Porque los ojos son una invitación a la lujuria. Porque mirarse equivale a hacer “Eye Babies”... Sabrina Poirier fue expulsada en 1997 por mirar a los ojos a un alumno en la biblioteca. No era una mirada de lujuria o amor; tenía algo en el ojo.

Esta es la gente que entra en los servicios legales del gobierno americano. Solo uno de cada tres profesores de estas escuelas posee el doctorado en la materia que imparten, pero sus alumnos han alcanzado en el plazo de cuatro años posiciones de poder en todo el escalafón. Posiciones de arbitrio cuando se decide que es tortura y que no. ¿Es el creacionismo apto para ser impartido en clase de biología? Preguntales a ellos ¿Es legal que el ejercito de los EEUU promueva la evangelización en Irak? Por supuesto.



La Separación de Iglesia y estado se ha ido al bar y está ciega de vodka. Seguiremos hablando del tema...






martes, 22 de julio de 2008

¡Felicidades!




Muchas felicidades a todos, hoy se celebra el Pi aproximation Day (22/7)



Con el Pipiribipipi...

Tal día como hoy nacieron el matemático francés Gaspard de Prony,el matemático y astrónomo alemán Friedrich Bessel o el popular bioqímico ucraniano Selman Waksman (le dierón el Nobel por descubrir el primer antibiótico contra la tuberculosis, pero le dieron el de medicina. Je, je... que se jorobe...)


Pero entre todos estos titanes de la humanidad nacidos tal día como hoy uno brilla con luz propia: nació, en 1937, Yasuhiro Kojima luchador de lucha libre (bajo el nombre de Hiro Matsuda) y entrenador de Hulk Hogan, "Mr. Wonderful" Paul Orndorff, Lex Luger, Ron Simmons, Keiji Mutoh, Ric Flair, y muchos más. Se le conocía como el maestro del "Japanese Sleeper", una variación de la llave "de la Cobra" que aplicó con maestria, por ejemplo, a Johnny Weaver (Johnny falleció el pasado viernes, ahora se verán las caras en el ring del cielo) . Destacó como luchador sobre todo en competiciones por equipos alcanzando varios campeonatos mundiales. Pero es como entrenador cuando se ganó una reputación legendaría gracias a su rudeza: el primer día de entrenamiento le rompió la pierna a un jovencito Hulk Hogan. Nada más curarse Hogan volvió a la escuela de Matsuda que, favorablemente impresionado, decidió hacer de él un campeón (los esteroides vendrían luego).


Hiro Matsuda dándole lo suyo a Dory Funk Sr. (Tokio, 1969). Pata negra nipona.

domingo, 20 de julio de 2008

Cinco Bodas y un Funeral: Las Cocretas del Mal.



Como Científico Maligno y Caballero que soy les debo una explicación, y esa explicación… se la voy a dar.

Llevo mucho tiempo sin escribir, es cierto. No se debe a la orden de alejamiento que me impedía acercarme a cualquier computadora con acceso a interné (internnnnné…) hasta el 2034. El hecho luctuoso que me ha mantenido fuera de juego durante estos meses es el haber cambiado de trabajo. He dejado los televisores LCD orientales (o asiáticos, como ellos prefieren ser llamados) y he vuelto a los videojuegos. He dejado de palparme las gónadas a dos manos junto con J. y he regresado a las jornadas intensivas-extensivas de horas extras dadas por supuestas y no remuneradas (hoy dos horitas, mañana tres y media…). Amigos, tomen mi palabra There’s no business like game business”.

Como pueden imaginar me quedaba poco tiempo libre para hacer El Mal o una serie de ciencia ficción española (¿Conjunción? ¿Disyunción?). La situación se vio empeorada esta primavera por el chaparrón de bodas que se cernió sobre mi cabeza. Amigos y conocidos se vieron afectados por una fiebre nupcial incomprensible para mi, que he luchado tanto por mantenerme alejado de determinadas instituciones: penitenciarias, psiquiátricas, las Fuerzas Armadas, valga la redundancia…
En cualquier caso y para evitar un descalabro económico mayor que contratar una hipoteca con el tipo variable, mi Media Chirimoya y yo decidimos repartirnos algunos de los eventos y acudir a otros en común. He aquí 5 ejemplos:
· Boda 1: Boda de alto copete en el Ritz. No se permite la entrada con bata de laboratorio. Va ella.
· Boda 2: Boda incestuosa y con pena máxima. Aplazada hasta que el cachorro casi pueda llevar arras.
No se hagan cruces, amigos. No me digan que nunca han oído de primos que pasan a mayores, además hacen muy buena pareja. Ya lo dice la sabiduría popular: “El que hace incesto, hace ciento”.
· Boda 3: Esto no es una boda, es un culebrón.
Érase que se era una parejita de toda la vida… hasta qué el mejor amigo de él pasó a ser el mejor amigo de ella… y él paso a convertirse en una bestia de gimnasio con una obsesión compulsiva por romper huesos que haría llorar al mismísimo Rojas Marcos. ¿Se presentaría el ultrajado en medio de la ceremonia montado en un quad y enarbolando una katana? No me la podía perder.
· Boda 4: El encuentro de dos clanes gallegos. Un apoteosis culinaria. Y ver a viejos némesis entre lo invitados… Fuimos los dos.
· Boda 5: Ni boda ni . Era una especie de renovación de votos de una pareja que lleva casada desde los tiempos de El Abuelobrrrrrrrr! ¡Esa puerta!) pero con cientos de invitados. Fue precisamente en este envite (¿Enlace / convite?) donde se produjo un hecho que contraría las leyes que rigen el universo y que mató mi cosmogonía particular. Se lo relato.

Esta reunión suponía para mí, además de una obligación política, un cierto escozor por el hecho de que la invitación a tan sui generis y arbitrario acto había venido acompañada por el comentario de que había disponible “para nuestra comodidad” una lista de bodas.
Media Chirimoya, que es muy apañada e inaccesible a sugerencias tales, se hizo con un artículo de menaje del hogar para regalarles que, aunque de gran calidad, a mi me parecía que podía ser percibido como insuficiente “para cubrir el cubierto”. Especialmente sabiendo que lo había conseguido con un precio super rebajado…
Con esta desazón me encaminaba yo a la plaza cuando, al ver el lugar escogido para el banquete, se me colocó la mosca tras la oreja. Un hotel… ¿En una estación de tren?
Lo que sospechaba se empezó a confirmar con los primeros canapés… triangulitos de pan bimbo con ligera capa de margarina y evidencia de jamón York. El pan estaba ya duro y el jamón presentaba el color y la textura de los primeros estados de la momificación. Lo maridé con un refresco de cola aguado y sin gas mientras sopesaba la posibilidad de retirar el regalo de la mesa de honor y deslizarlo en el bolso de mi pareja reproductiva cuando trajeron el siguiente bocado. En ese momento alcancé la conclusión de que el enlace estaba patrocinado por Findus: las croquetas estaban calientes por fuera y eran cubos de hielo por dentro, además estaban malas.

Las Leyes de la Termodinámica Vs. la Fe: por el canto de una croqueta.
La humanidad está en el mundo por que tiene que haber de todo. Y cada uno y cada cual se monta sus historias para justificar su construcción universal, hay quien prefiere las leyes de la termodinámica (la energía ni se crea ni se destruye, sólo se transforma) y hay quien da la pirueta de “la imposibilidad de la proyección hasta el infinito de la causa-efecto”, una buena hostia y a dormir a pierna suelta. Lo importante es que a cada cual le funcione.

Al menos eso creía yo hasta que vi como se quebraba el segundo enunciado de la Ley de la Croqueta del Profesor Negativo Jr.




Ley de la Croqueta del Profesor Negativo Jr.
Una croqueta, para ser considerada tal, debe cumplir estos enunciados:



1º) Llamarse “croqueta”.
Ni cocreta, ni cocleta, ni concreta… ¡croqueta! Puede que los acepte la RAE en algún momento por estar muy extendidos entre los catetos medios pero está mal dicho. Fin de la discusión.
Escribía el Trueba pequeño que hay cosas que están sobrevaloradas como las pollas grandes o los estudios universitarios. Puede tener cierta razón, aún así yo siempre he considerado que la Universidad entendida como una Universitas Rerum (vamos, una universalidad de cosas) que incluye clases y conferencias, bocadillos de tortilla y mus debería ser suficiente para evitar que los catetos medios, como vd. y yo, dijésemos armondiga o curasán. Aún así nos empeñamos en hacerlo mientras creemos que por llevar unas gafapastas, una camiseta de El Señor de los Anillos, escuchar La Casa Azul o leer libros de Ken Folett formamos parte de la avanzadila intelectual de la cultura popular.
Bueno, pues no es así. Si no, estaríamos leyendo los clásicos rusos y no leyendo sobre croquetas y, mucho menos, escribiendo sobre ellas.



2º) Estar buenas.
Son de jamón y pollo, pero también de cocido, de espinacas o de Cabrales. Estoy seguro que en El Bulli también hay “Aire de croquetas”. No importa, siempre están buenas.
Da igual la ocasión, después del partido dominguero o en la recepción del embajador, las croquetas nunca decepcionan.
En teoría, podría haber croquetas malas, como las croquetas de Osama Bin Laden, las del Doctor Mengele o las de Angela Channing pero en la práctica nunca se habían visto, hasta ahora.

3º) Las de mi abuela son las mejores.
No me refiero a “mi abuela” de forma genérica. Me refiero a la mía. A mi Yaya. Mi Yaya ha cuidado de cinco generaciones y a todas las ha nutrido con croquetas, grandes y robustas, proyectiles de amor que nunca la quedan “tan bien como la otra vez” pero que son devoradas en sacramental silencio mientras se lleva la cuenta mental de cuantas ha comido el de al lado.
No hay nada igual en el mundo. Ya saben que no exagero ni un ápice. Lo saben en los cinco continentes.
En su última gran actuación, fuera de casa y ante una veintena de comensales, hizo que la mesa se pusiese en píe y la ovacionase.
No me vengan ahora con las de su abuela o su madre, porque me reservo la posibilidad de borrar o modificar sus comentarios de forma arbitraria.

Entenderemos que la ruptura del segundo supuesto es la excepción que confirma la regla y daremos esta Ley por válida e inmutable.

Yaya, todo este rollo era para decirte que eres la mejor abuela del mundo, y que te quiero mucho.

miércoles, 9 de julio de 2008

Abejaruco a Lince Ibérico

A la zaga del post de Rebilated, y porque lo acabo de ver en el blog de Escolar con motivo del menú que sirvieron ayer a los componentes del G8, caigo en la inconmensurable vileza de colgar un tutubo en el blog. Un fragmento de la obra 'Alejandro y Ana', del grupo Animalario; grandísimo monólogo de Javier Gutiérrez, actor extraordinaire cuando no está cagándola con gilipolleces como la insoportable 'El asombroso mundo de Borjamari y Pocholo'.

lunes, 7 de julio de 2008

Y de postrecin...

¿A que no sabeis que me pusieron de postre el viernes pasado después de que colgase el post de relleno?
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.Piensa, leche, no te lo voy a poner tán facil.
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.Venga, que ya casi lo tienes.
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.No es dificil.
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.¿Pensaste en melón relleno?
.Pues has fallado, fué brazo de gitano, bwahahahahahahahaha.
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viernes, 4 de julio de 2008

Post de relleno.

Como esta semana no hemos posteado ninguno parece que me toca salvar la situación con un post de relleno, ahora que viene el verano.
Perdón, quise decir "postre de melón relleno", pero es que se me trabaron las palabras.

Postre de melón relleno:

Ingredientes:

-1 melón grande y maduro
-1 piña pequeña pelada y cortada en daditos
-1/4 kg. de cerezas
-1 melocotón maduro.
-3 plátanos pelados y cortados en rodajitas
-2 vasos de zumo de naranja
-4 cucharadas de azúcar molida
Preparación:

Se corta una tapa del melón y se extrae la pulpa, cortándola en dados o dándole forma de uva.
Se mezcla con el resto de frutas y se coloca dentro del melón vaciado.
Se mete en el frigorífico.

Antes de servir:
Se mezcla el zumo de naranja recién exprimido con el azucar y se echa, sobre la fruta, dentro del melon.

Ale, ahi teneis un postre sano, facil y fresquito para este verano.

P.D.: Por cierto, a ver si alguno de mis cobloggers me puede explicar quien cojones demonios creó la etiqueta "las otras etiquetas me pegan palizas y lo graban con un móvil cuando nadie mira para subirlo luego al youtube, ".


Claro, que como está la cosa ahora igual es un viruses found o un hackeo.

Para que veais que no os miento.




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